Prometí preparar unas galletas integrales, pese a mi miedo de que el resultado fuera un vistoso bocado de arena. Las harinas integrales están bien, pero en su justa medida; a lo que te pasas un poco aquello se vuelve intragable.
Decidí aromatizarlas con naranja, pensé que entre la ralladura y el zumo podían hacer frente al poder integral. Incorporé también copos de avena que, pese a todo pronóstico, han aportado mucho sabor al resultado final, se nota mucho el toque.
El resultado ha quedado vistoso, aromático y tragable (que era lo esencial del asunto).
Ingredientes:
125 gr. mantequilla (en punto pomada)
125 gr. azúcar
1 huevo
1 naranja (ralladura y el zumo de media)
250 gr. de harinas integrales (usé la mezcla del Lidl)
50 gr. copos de avena
Primero se trabaja un poco la mantequilla con el azúcar hasta conseguir una pasta homogénea, después se incorporan el resto de ingredientes hasta que se forme un masa no demasiado pringosa.
Se extiende, se le da forma y al horno!!
El horno debe estar precalentado y a unos 180 grados (pero ya sabéis que cada horno es un mundo). Del tamaño que yo las hice (pastas de té) tardan no más de 10 minutos en estar listas. Después se deben dejar enfriar sobre una rejilla y listo.
En el detalle de la foto antes de ir al horno se puede apreciar la presencia de los copos de avena y las ralladuras, espero que no penséis que es por pereza en el amasado.
Con los ingredientes que indico a mi me salieron unas 40 galletas pequeñas (usé moldes para pastas de té).
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